Vi tus ojos y me hundí en tu ser,
mire tu cuerpo y quise enloquecer,
observé tu alma… y lloré.
Una nube gris se apoderó de mí,
frene los sueños, contuve el deseo,
ese impulso de correr a ti.
Me quedé quieta,
me mantuve callada,
me alejé de allí.
Recordé el pasado,
los errores,
el daño causado
por lo utópico de mi ser.
Decidí mirarte de lejos,
observar tus pasos,
tus movimientos,
verte…
como un niño a una golosina
antes de comer,
como una ama de casa
a un aparador
con ropa que no puede tener.
Entonces volví en mí,
desperté del sueño,
de la droga que inyectas a mi cuerpo,
para ser lo que siempre fui:
Un ente pasivo y frió,
que camina sin saber a dónde ir.
1 comentario:
Hola Oli.
No soy Manuel, soy un admirador secreto, jojojo.
En mi humilde opinión. está bien escrito
Aunque yo cambiaría algunas palabras y expresiones, cuando te vea te digo cuáles serían, después de todo yo no sé nada de esto y por lo tanto no puedo hacerte esas sugerencias en un Blog, jejeje.
Cuando vaya a tu casa te digo los cambios que le haría.
Sigue escribiendo, la mejor forma de mejorar tus escritos es practicando. Cada vez son más buenos.
Nos vemos pronto, saludote, bye bye
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